Generar contactos B2B en Italia

Nuevos mercados

Descubre las particularidades del mercado italiano y genera clientes potenciales

La cultura empresarial italiana es única. Debemos recordarlo cuando iniciemos la cooperación con los empresarios italianos. Nos permitirá evitar malentendidos innecesarios y nos permitirá entender bien a nuestro potencial socio comercial. Entonces, ¿cuáles son las diferencias?

El negocio italiano se basa en la relación y la confianza. Antes de iniciar cualquier cooperación, los italianos deben conocer bien a su posible socio comercial. Esto se hace reuniéndose en un restaurante, tomando una copa por la noche o un café por la tarde, pero recuerda que no son reuniones de negocios. Suelen ser reuniones amistosas destinadas a conocerse mejor en el ámbito privado.

El concepto de tiempo italiano tampoco es como en el resto del mundo. Para nosotros es una buena práctica llegar 2 minutos antes. Los italianos consideran normal llegar 15 minutos tarde, aunque este tiempo depende de la importancia de la reunión: las conferencias con un gran número de personas suelen empezar media hora después de la hora prevista.  Por eso conviene acordar con nuestros clientes unas normas claras en materia de la agenda y plazos para evitar malentendidos innecesarios en el futuro.

Ten en cuenta que los italianos representan una cultura de alto contexto. Esto significa que los mensajes directos se consideran infantiles. Cualquier información debe ser buscada entre líneas, sacada del contexto. Es importante prestar atención a la comunicación no verbal: a menudo contiene un mensaje más importante que las palabras.

Los italianos aprecian cuando un posible contratista «es memorable», o sea que destaca de la multitud con algo a lo que vale la pena prestar la debida atención. Les encanta la elegancia en los negocios: la vestimenta adecuada, el respeto a la contraparte. Una promesa verbal es igual de importante que un contrato.